Entre el 25 de octubre y el 5 de noviembre, dos estudiantes de nuestro establecimiento vivieron una experiencia inolvidable en la hermosa ciudad de París, acompañadas por nuestro rector, M. Jorge Ruff y Sra.
Desde el año pasado y con el objeto de estimular el aprendizaje del idioma Francés en el Colegio , se instauró una beca que consiste en viajar a Francia con todos los gastos pagados de pasajes y estadía más la alimentación e ingresos a distintas actividades culturales. Nos acompaña en este esfuerzo importante del Colegio, la Universidad Bernardo Ohiggins, puesto que el año pasado ya nos favoreció con una beca para estadía en Toulouse y Paris y este año para una becaria en Paris.
Lynda Gutiérrez Cárcamo, gracias a la beca otorgada por la Universidad Bernardo O’Higgins, y Marthina Recabarren Recabarren, beneficiada con la beca del Colegio Bicentenario Louis Pasteur, tuvieron la oportunidad de conocer de cerca la cultura, la historia y la vida cotidiana de Francia.
Como parte de los requisitos las dos estudiantes asistieron a talleres de francés durante el año y la selección fue realizada a través de una prueba en donde se midieron las diferentes habilidades como expresión oral y escrita.
Fue una experiencia enriquecedora que sin duda dejará una profunda huella en su formación personal y académica.
Nos llena de orgullo ver cómo nuestras estudiantes representan al Colegio Bicentenario Louis Pasteur en el extranjero, llevando con ellas los valores, el compromiso y el espíritu de superación que caracterizan a nuestra comunidad educativa.
Palabras de Lynda Gutierrez “Aún me resulta increíble asimilar la maravillosa experiencia que viví en Francia gracias a la oportunidad brindada por el colegio y al apoyo de la Universidad Bernardo O’Higgins, que hizo posible mi participación. Este viaje no solo me permitió conocer lugares emblemáticos y disfrutar de la riqueza cultural y gastronómica del país, sino también compartir momentos muy especiales junto al Rector y Sra. y mi compañera Marthina. Quiero expresar un agradecimiento muy especial a Madame Claudia, mi profesora de francés, quien siempre confió en mí, me recordó lo capaz que soy y me ayudó a mejorar mi dominio del idioma. Estoy profundamente agradecida por esta oportunidad única, que me hizo crecer tanto personal como académicamente, y por la calidez y dedicación de nuestros monsieur y madame, quienes hicieron de esta experiencia algo verdaderamente inolvidable.“
Palabras De Marthina Recabarren Recabarren
“Principalmente, me gustaría agradecer a la Corporación del colegio y a nuestro Rector, M. Jorge Ruff, por brindarnos una oportunidad que no solo aporta en lo académico, sino también en lo personal. La experiencia fue prácticamente un sueño, una oportunidad que espero que muchos otros estudiantes del colegio puedan vivir en los años que vienen. También quiero agradecer especialmente a Mme Claudia Venegas, nuestra profesora de francés y quien estuvo a cargo de nuestras tardes de taller en el colegio, por motivarnos a seguir intentándolo hasta el final y por ser nuestro principal apoyo. Y, por supuesto, a Mme Emma Lara, la profesora que despertó mi interés por el idioma desde pequeña y que inició el camino que hoy me permitió viajar.”
El ingreso a Francia se hizo a través del aeropuerto Charles de Gaulle, vía Latam con escala en Sao Paulo, Brasil. Ya en Paris, se hicieron varios recorridos para conocer la ciudad «Lumiére» vía metro, Bateaux mouches, buses turísticos. Una visita inolvidable, fue aceptar una gentil invitación que el Embajador de Chile en Francia, M. Raúl Fernández Daza, la que consistió en una entrevista de las alumnas a él y su Jefe de Gabinete, asistir a un concierto de música creada para niños y jóvenes con espectro autista, y finalmente un coctel en la misma embajada. Las alumnas tuvieron la ocasión de compartir con los invitados al concierto, quienes eran principalmente estudiantes chilenos que realizaban pasantías y/ o trabajaban en Paris. La noche parisina les permitió estar en la base de la Torre Eiffel, absolutamente iluminada, puesto que la Embajada se encuentra a unas cinco cuadras de este emblemático lugar.
La subida a la Torre Eiffel, el domingo 02 de noviembre, fue un acontecmiento inolvidable en sus vidas, desde los protocolos y resguardos de seguridad previos, hasta tomar los dos ascensores hasta la cumbre de 300 metros en el sector de Campo de Marte a orillas del Río Sena.
Partiendo desde la Gare de L Est, Lynda y Marthina pudieron disfrutar de un viaje a Metz, ciudad francesa llena de sorpresas, a través de un viaje en tren rápido, 315 km/hr, y visitar la la catedral Gótica más importante de Europa, un museo sobre ruinas del imperio romano, la estación de trenes más bonita de Europa y disfrutar de sus callejuelas típicas y también comidas, para regresar a Paris durante la noche.
Una reunión a los pies del Panthéon y la Universadad de La Sorbonne, con ilustres descendientes de un fundador de la Alianza Francesa de Traiguén, el Sr. Moreau, permitió a las alaumnas compartir un café con relatos de primera línea de lo que significa vivir en Paris por parte de chilenas de la familia Cousin. Felices estas descendientes fueron las primeras en difundir la grata conversación a través de las redes sociales.
Difícil describir todas las oportunidades de lugares visitados, tratando de ejercitar el idioma aprendido, en el Metro, en las tiendas, Lafayette incluida, en los restoranes, las tiendas de recuerdos, con anécdotas también en el hotel de alojamiento o en otros lugares y rincones de Paris. Por supuesto en los exteriores del Louvre y la Opera, Arco de Triunfo, el espacio conocido com el Arco de la Defensa y la Notre Dame, Place Vandome, Barrio Montmartre, Hotel Ritz.
Mención aparte la visita a una exposición internacional del Chocolate que coincidión con la estadía en Paris. Una mañana completa dedicada a ver los resultados de distintos países con sus muestras y degustaciones.
El viaje de regreso también vía Sao Paulo, fue sólo dormir hasta llegar a Chile y luego Temuco. Un sueño hecho realidad, obtenido por méritos propios.







